PRIMAVERA VERANIEGA

Yo – Hay una escena en LOST en la que los dioses (que en realidad son dos tipos, un morocho y un rubio, que son hermanos) están charlando acerca de los hombres y el sentido de la vida, mientras juegan a una especie de entretenimiento rústico básico, como de madera... Me encanta esa imagen, de los dioses apacibles pensando qué trabajo les damos los seres humanos....
A - Cierto... yo no sé bien si creo, o si no creo... a mí me dan trabajo ellos...
Yo – Si fueras un dios, ¿qué dirías?
A - Nada...
Yo – Estaríamos en un largo silencio...
A - Sí.
Yo - ¿Cómodo o incómodo?
A – Cómodo...
Yo – Eso es lo que me gusta de nosotros... podemos estar horas y horas... o ir en el auto muchos kilómetros como ahora en silencio y estamos en paz...
A - ...................................................................................................................
Nos abraza la mañana... envueltos en la bruma sentimos que nos arropan los primeros rayos del sol mientras entre sueños nos preguntamos por qué no pensar que estamos naciendo de nuevo... así podríamos convertir este instante fugaz – que teóricamente desparecerá en cuestión de segundos – en un recuerdo eterno...
A - ¿Para siempre?
Yo – Sí.
Las montañas verdeamarronadas de San Marcos, entretanto rezan por nosotros...
A - ¿Nos protegen?
Yo – Sip.